En Clínica Eguren, tu clínica dermatológica en Madrid,sabemos que una de las afecciones más comunes entre nuestros pacientes es el enrojecimiento y malestar en la piel, con intolerancia a diferentes productos, características comunes de lo que denominamos piel sensible. Es un trastorno dermatológico frecuente que puede afectar a niños, jóvenes y adultos.
Existen diferentes factores que hacen que tu piel resulte hipersensible. Desde la alimentación hasta la genética o tu rutina de higiene y cosmética pueden influenciarte negativamente. Si quieres aprender a proteger tu piel, has llegado al lugar indicado. Aquí conocerás las claves para cuidar una piel sensible y las razones por las que presenta escozor, ardor o enrojecimiento.
Piel sensible o intolerante, ¿qué es?
Es aquella que reacciona con facilidad ante estímulos de diversa naturaleza. La persona que tiene la piel intolerante puede sufrir de constantes sensaciones de cosquilleo, escozor, hormigueo o picor de forma intermitente.
Además de las principales sensaciones que tiene una persona de piel intolerante, la afección suele verse acompañada de enrojecimiento. Conforme al cuadro de hipersensibilidad, el malestar puede variar en gravedad e incidencia.
Entre los factores de diversa naturaleza que provocan estas reacciones tenemos:
- radiación ultravioleta,
- variaciones extremas de temperatura
- cosméticos y jabones
- razones psicológicas
- causas hormonales
Es posible que presentes una alteración en la barrera cutánea, como consecuencia de la deshidratación. También contribuyen la secreción excesiva de neurotransmisores específicos o el estrés oxidativo por sobreproducción de radicales libres.
Características de la piel sensible
Tiene ciertas características que le hacen distinguirse de una piel normal. Recuerda que las rojeces y las alteraciones sensitivas son intermitentes. Sin embargo, existen factores específicos indicadores de la piel intolerante. Estos son:
- Tu piel se deshidrata y seca con facilidad. Esta es la principal muestra de que su función barrera no está actuando de la manera en que debería.
- La piel reacciona ante cualquier producto. La irritación es el síntoma específico detrás de esta característica de piel sensible. Debido a que la tez está reseca, no tiene la fuerza necesaria para resistir la exposición a productos químicos.
También es importante considerar factores como edad, genética y rutina de vida. Una mala alimentación o el estrés pueden hacer estragos en el bienestar de tu piel. Además de que exponerla a elementos agresivos como algunas cremas o combinaciones no adecuadas de productos, al exceso de humedad o a la contaminación ambiental, tienen un correspondiente efecto negativo.
Tipos de sensibilidad en la piel
Hay diferentes trastornos por los cuales podemos acabar experimentando síntomas de sensibilidad en la piel. Entre los más comunes es posible encontrar:
- Acné
- Rosácea
- Alergias
El acné es un trastorno de la unidad pilosebácea (la glándula sebácea y el poro de la piel por el que drena su contenido), con exceso de seborrea, obstrucción del poro y sobreinfección bacteriana, y condiciona un tipo de sensibilidad, con gran enrojecimiento, por este mal funcionamiento del poro cutáneo y la tendencia a la retención con formación de “espinillas” o comedones.
Por su parte, la rosácea es otra clase de sensibilidad de la piel que se caracteriza por la dilatación de los vasos sanguíneos faciales, con un mal funcionamiento por parte de los mismos que produce reactividad excesiva a los cambios de temperatura y otros factores, que cursa con enrojecimiento. Todavía se desconoce qué causa la rosácea pero factores como el picante, el vino tinto y el calor son indudables desencadenantes de episodios de enrojecimiento que llamamos “flushing”.
La hipersensibilidad o alergia puede ser otra causa de sensibilidad de la piel a través de una barrera cutánea dañada, que por daños en la grasa natural de la epidermis por el uso excesivo de limpiadores y detergentes, ha dejado de funcionar de manera adecuada
Reacciones según los tipos de piel
Enrojecimiento o acné también pueden variar acorde a los diferentes tipos de pieles que hay. Es posible que una u otra ocurra en mayor o menor gravedad, de forma constante o no.
Una sensibilidad natural o constitutiva es la propia de una persona con la piel fina. Con ciertos productos tópicos adecuados que protegen y refuerzan, es posible paliar esta tendencia.
Caso distinto ocurre si se trata de la sensibilidad reactiva. En el primer caso, la característica específica es la sensación de ardor. El cutis se calienta, pica y escuece. Esto se debe a la sobrerreacción a diferentes estímulos, con síntomas en cada episodio de reactividad.
Por último está la sensibilidad ocasional de la piel. Esta se caracteriza por fases que comienzan y terminan momentáneamente. Las incomodidades son esporádicas, variando entre escozor, edema o hinchazón y enrojecimiento.
Cuidados para la piel sensible
Sea cual sea tu tipo de piel, ya tengas piel con sensibilidad natural, reactiva u ocasional, te será posible cuidarla con métodos bastante similares entre sí. Todo se enfoca en las diversas causas detrás de esa hipersensibilidad cutánea, causada por elementos físicos, químicos o externos. Una de las primeras medidas es buscar ayuda cualificada en una clínica dermatológica en Madrid de forma regular. Contar con el apoyo de profesionales en dermatología facilitará que mantengas tu piel en excelentes condiciones.
En Clínica Eguren tenemos además la experiencia de que los remedios caseros, que son comunes entre las amantes de la belleza y la salud, deben usarse con mucha precaución. No sabes si alguna mezcla específica, en lugar de aliviarte desencadenará una mayor reacción a la original. Hemos visto muchos pacientes que han lamentado el acudir a una receta o recomendación de amigos, familiares o profesionales no cualificados, y han sufrido consecuencias indeseables.
Ahora bien, si quieres cuidar de tu piel sensible desde casa y que no te cause mayores complicaciones, entonces sigue nuestras recomendaciones:
Hidrata tu piel
Es un paso fundamental para cuidar la función barrera de tu piel. Una buena hidratación mejora el aspecto pero también te protege de elementos y agresiones externas como la contaminación, la sequedad ambiental o el calor o frío excesivos.
Durante nuestra consulta en la clínica dermatológica Eguren en Madrid, te recomendaremos el mejor producto para hidratar tu rostro en la mañana y antes de dormir.
Protégela del sol
Es fundamental que utilices protección solar con un factor protector solar (FPS) suficientemente alto. Tu especialista dermatológico te aconsejará cuál es el filtro específico que deberás usar según tu color de piel, la estación del año, la zona anatómica o la actividad que vayas a llevar. Eso sí, protege tu piel del sol tanto en verano como invierno.
Realiza una rutina diaria de limpieza
¿Recuerdas el acné? Pues mantener una rutina diaria de limpieza hace la diferencia a fin de despejar el exceso de seborrea, facilitar el drenaje del poro, reducir la carga bacteriana y devolver estabilidad a la barrera cutánea facial de la persona con acné.Evita frotarla porque al estar tan sensible solo empeorarás la situación. Si decides exfoliar, hazlo solo 1-2 veces por semana.
En tu visita a la clínica dermatológica también puedes preguntar por los productos específicos para una limpieza de piel sensible. Favorecerá la condición y evitarán nuevas reacciones por productos agresivos.
Reduce el tiempo en la ducha
El agua caliente está entre las causas de la deshidratación de la piel. Opta por ducharte con agua tibia pues es lo más recomendable a fin de evitar alteraciones de la función protectora de tu piel.
De hecho, cuando limpies tu rostro, en lugar de tibia, elige agua fría. Aunque no lo creas, tiene grandes efectos a favor de tu tez. Pero, no lo hagas de manera prolongada. El tiempo de la ducha y la limpieza debe ser reducido a fin de procurar buenos efectos.
Utiliza cosméticos para pieles sensibles
No te olvides que el uso de ciertos productos es capaz de desencadenar un cuadro de sensibilidad cutánea. Además de jabones y cremas, el maquillaje tiene la capacidad de alterar el bienestar de tu piel.
Lo mejor entonces será buscar cosméticos específicos para pieles sensibles. También se les conoce como hipoalergénicos. Son ideales a fin de que puedas cuidar tu bienestar, sin dejar de tener el aspecto que deseas.
Evita el estrés excesivo
Parece fácil de decir, pero no por ello es menos cierto que el estrés nos resta salud y contribuye al mal funcionamiento del cuerpo a diferentes niveles. Sabemos que el estrés también puede hacer estragos en tu piel. Escoge una forma de vida que te permita tener periodos de descanso, cuidado personal, tiempo libre y sueño correcto, y tu piel lo agradecerá.
Haz ejercicios
Por tu rostro y por tu figura. Sí, una rutina de ejercicios durante 3 días a la semana hace maravillas a la piel sensible. Te aligera del estrés, libera tus poros de agentes contaminantes y favorece la eliminación de células muertas que los pudiesen obstruir.
Utiliza cosméticos para pieles sensibles
No te olvides que el uso de ciertos productos es capaz de desencadenar un cuadro de sensibilidad cutánea. Además de jabones y cremas, el maquillaje tiene la capacidad de alterar el bienestar de tu piel.
Lo mejor entonces será buscar cosméticos específicos para pieles sensibles. También se les conoce como hipoalergénicos. Son ideales a fin de que puedas cuidar tu bienestar, sin dejar de ser coqueta.
¿Por qué aparecen rojeces?
Es una afección común que puede ocurrir en cuadros de pieles sensibles. Una de las principales causas que tiene es la dilatación de los capilares sanguíneos de la dermis o cap media de la piel, con hiperreactividad. Estos capilares alterados tienden a dilatar y por lo tanto, dar paso a trastornos inflamatorios en las capas internas de la piel. Esto tiene como efecto enrojecer la zona exterior; inicialmente esto ocurre de forma ocasional
Ahora bien, si las rojeces se prolongan por un periodo de tiempo esto quiere decir que la debilidad capilar ha empeorado. La dilatación es más visible e incluso abre la posibilidad de que se convierta en una afección permanente.
Entre los factores que desencadenan o agravan las rojeces están:
- la radiación ultravioleta,
- contaminación,
- ciertas comidas; el alcohol, los picantes
- el estrés,
- cambios hormonales,
- nuestra herencia genética
Síntomas de la rosácea
Tiene sus propios signos y síntomas. Va más allá de un simple enrojecimiento persistente. Es una condición común en el rostro. Esto se debe a que los capilares más sensibles suelen encontrarse entre la nariz y las mejillas; en menor medida se puede apreciar también en el centro de la frente y en el mentón.
También puede presentar protuberancias e inflamaciones. Existen casos en que el enrojecimiento se acompaña por granos como acné, además de hacer que al tacto se sienta más caliente que el resto.
Otros pacientes de rosácea llegan a sufrir problemas de ojos. Afecta a la mitad de las personas con esta afección, generando enrojecimiento en los ojos como algo parecido al acné en los párpados.
Cómo se trata la rosácea en una clínica dermatológica en Madrid
Al acudir a una clínica dermatológica en Madrid es importante que entiendas bien el proceso para tratar esa rosácea.
Lo primero que hará el especialista será observar cómo te afecta la enfermedad. ¿Solo aparece en la piel o se presenta en los ojos también? De esto depende que pueda proponer una visita oftalmológica.
Luego te hará una entrevista en la que buscará descubrir los posibles causantes de la rosácea. ¿Es temporal o permanente? ¿Tomas alguna clase de medicación?
Una vez que respondas sus preguntas podrá avanzar a nuevos estudios que confirmen el diagnóstico y por consiguiente el mejor tratamiento contra la rosácea.
Pero también es importante que despejes tus dudas en tu clínica dermatológica en Madrid. Descubre qué puedes hacer si la afección disminuye por sí sola, qué rutinas de cuidado de la piel puedes seguir.
Tratamientos con luz pulsada IPL
Uno de los tratamientos que posiblemente encuentres en una clínica dermatológica en Madrid es la luz pulsada intensa o IPL. Lo primero que debes tener en cuenta es que la rosácea no tiene cura permanente, aunque sí tenemos capacidad de producir mejoría en diferentes aspectos, y el IPL es una excelente herramienta para producir una gran mejoría duradera.
Lo siguiente es entender en qué consistirá el procedimiento. Esta luz intensa emite un haz a los capilares sanguíneos haciéndoles disminuir de tamaño. La luz pulsada es un tratamiento común porque puede tratar desde casos leves hasta rojeces importantes.
Otro punto a su favor es que incluye beneficios adicionales. Es también recomendada para eliminar manchas, haciendo que la tez sea más suave al tacto. También estimula la creación de colágeno y reduce los poros.
Preparar la piel ante el frío
Aunque los tratamientos que te recomienden sean efectivos, es importante que hagas lo posible a fin de prepararte para cada temporada, en especial, el invierno.
- Busca una crema hidratante especial para tu rostro. Evitará que la sequedad de la temporada y el viento alteren tu dermis.
- Planéate una buena nutrición. Toma dos litros de agua al día, consume grandes cantidades de antioxidantes y fibra. Una sopa e infusiones son ideales también a fin de que te mantengas hidratada en la temporada.
- Continua con tus visitas regulares a la clínica dermatológica en Madrid. También forma parte de una rutina saludable hacer revisiones y chequeos anuales. Tu piel te lo agradecerá.
Cuida tu piel sensible en la Clínica Eguren, tu Clínica Dermatológica en Madrid
Soluciona los problemas de tu piel sensible en manos de nuestro equipo de especialistas. Tener una piel sana y bonita es tu mejor carta de presentación y te hará verte bien. Contamos con experiencia en dermatología médico-quirúrgica y estética, ideales para solucionar de forma eficaz tu inquietud.